martes, 28 de julio de 2009

Saber elegir

Tengo la sensación de no saber elegir nunca la fila correcta en la caja del súper. Es una gran decisión que tomar... y suelo equivocarme. Miro a las personas que tengo delante, la cantidad de compra que llevan en las cestas o los carros y hago un análisis de cual será la cajera más rápida, y no sirve de nada. La abuelica que llevo delante con solo una barra de pan todavía no se ha acostumbrado al Euro, y después de darle vueltas y vueltas a las monedas en su pequeño monedero, acaba diciendo eso de "anda maja cógelo tú, que yo no entiendo". La señora con carro de bebé se ha olvidado de pesar los tomates y sale a la carrera con niño incluido a pesar la bolsa. En el viaje hasta la báscula aprovecha y coge los pañales y toallitas que se había olvidado. Otra señora, que es conocida de los padres de la cajera le pregunta por toda su familia, por si ya tiene novio, a donde va a ir de vacaciones, etc. A un señor no le pasa la VISA por el lector de tarjetas y no tiene dinero en efectivo, con los comentarios típicos como "pues vengo ahora del banco y hay dinero en la cuenta". La señora que quiere que le lleven la compra a casa a las 11 en punto y a esa hora el reparto está en otra zona del barrio. El cambio de turno de las cajeras que aprovechan para poner verde al encargado en voz baja por lo mal que las trata, mientras veo como las personas de la otra caja avanzan y avanzan. Y cuando ya me toca a mi, se ha acabado el rollo de papel de la caja con el que se hacen los tickets y hay que abrir la máquina para cambiarlo. Todo hace pensar que voy a conseguir salir del súper, pero aparece la mujer que compró un tinte para el pelo y no le gusta y lo quiere cambiar. Por supuesto no lleva ticket y la cosa se complica. Y ya por fin atravieso la puerta que se abre sola y llego a la calle, pensando que una vez más no he sabido elegir bien la fila correcta. Así me siento hoy, alguien que no sabe elegir. Alguien que parece que no aprende nunca a saber cual es la mejor fila en la vida. A este paso acabaré comprando en internet...

4 comentarios:

Hache dijo...

Yo suelo estar en tu fila, detrás de ti, y te aseguro que eliges la fila buena. Esa que te hace fijarte en la abuelita, la mamá con tomates a granel, el señor de la VISA. En la otra, todo es tan rápido que es como si no existiera. La otra es la de los que ven la vida solo en televisión. Tú incluso puedes elegir el propio final de tu historia. Eres afortunado, SinHache,¡no compres on-line! (la abuelita y la mamá te echarán de menos y esa cajera, tú lo sabes, está loquita por tus huesos)... ¡Me lo dijo a mí!

Anónimo dijo...

Hola Jose! a mi me pasa lo mismo, siempre pasa algo cuando voy a pagar a la caja, pero hache tiene mucha razon, a veces te desesperas pero se trata de eso, de observar lo que pasa a tu alrrededor y poder elegir, luego esta si piensas que la eleccion ha sido la acertada, pero siempre aprendes algo...

Jose dijo...

H: graciassssssssssssss, eres un sol...

Ana: Deberíamos hacer una asociación entre todos, Asociación de torpes eligiendo caja en el super... ATECES

Toxica dijo...

Y sólo en la fila del super te equivocas vs, que suerte la que tenes!!! :)