lunes, 15 de febrero de 2010

Bolis

¿Y para qué quieres tú eso?, me preguntó mi madre cuando le pedí que me comprara un boli de aquellos que tenían cuatro colores. Era gordo, azul de mitad hacia un lado y blanco hacia el otro donde estaban las palanquitas que cambiaban la tinta de color. En esa misma época yo soñaba con algo que después le pasaría a Amelie. Descubrir un agujero secreto detrás de un rodapié, o de una baldosa, o dentro del armario empotrado del pasillo. A veces daba pequeños golpes para ver si sonaba a hueco alguna pared o el suelo de la casa. Me hubiera gustado encontrarlo, pero no fue así. Alguna vez pensé en hacerlo yo mismo, pero antes o después sería descubierto. Si lo hubiera hecho, tal vez ahora habría aparecido Amelie en mi vida. Me observaría desde lejos, sin que yo pudiera verla, pensando en como hacerme más feliz, me haría llamadas a cabinas de teléfonos para indicarme la siguiente pista, pintaría rayas con tiza en las escaleras de mi casa, entraría en la de mi vecino sin ser vista para que dejara de tocar el acordeón todo el día, me enviaría fotos suyas vestida como el Zorro, y yo iría cada mañana al café donde trabaja para verla mientras desayuno y tal vez un día de esos me devolvería todo lo que habría encontrado en el hueco de la pared de aquella casa en la que nunca metí ni unas fotos ni ese boli de cuatro colores que mi madre me compró cuando era pequeño.

4 comentarios:

Ada Red dijo...

Qué bueno es tener a veces un poquito de Amèlie..
A quién no le gustaría?
Gracias por recordármela!
Boas noites

MAROCHA dijo...

Yo nunca tube un boli de esos. Pero está bien, pues así le hecho la culpa de todo lo malo que me pasa.

Hache dijo...

El mío era naranja y blanco,... ¡Me encantaba! y yo metía mis tesoros en cajas de metal y las enterraba en el jardín...

Aranzazu dijo...

Bic naranja escribe fino, bic cristal escribe normal. bic, bic...bic, bic,bic.
Tu tuviste uno, yo tuve dos rojo y azul modelo cristal y aunque los veía en el escaparate de la papelería Cuellar tampoco desee fervientemente tener uno como el tuyo.
Dijésemos que pude pasar sin él sin trauma alguno.
Jose, me gustaría si tienes tiempo que te metas en mi blog.
compagnidiviaggio.blogspot.com
donde en la sección de curiosidades
He hecho un comentario a tu exposición que deseo que te guste porque imita un poco tu trabajo artístico.