Quiero perderme un tiempo, no sé si mucho o poco, pero un tiempo. Quiero largarme de aquí, bien lejos de mí, quiero perderme de vista. Y cuando lo haga no quiero mandarme mails contándome como va todo, porque todo va como siempre, porque tengo la sensación de que todo se repite. No quiero mensajes míos al móvil, cuando vuelva de estar lejos de mí ya me contaré todo lo que me he perdido. Hasta entonces... bien lejos, y me lo digo muy en serio, necesito olvidarme, tener ganas de verme de nuevo, de tomarme un café con churros o darme un paseo en bicicleta conmigo mismo y que sea diferente. Hasta entonces... me voy, porque ya no veo más allá de mi nariz.
2 comentarios:
Noooooooooooooooo, ¡te echaremos de menos! Necesitamos que estés para tener una referencia y no perder el equilibrio. No te vayas y si es así, que sea cerquita, que tu no te veas, pero nosotros sí. ¡Una idea! ¡Quítate las gafas cuando pases por los escaparates de las tiendas! ¿Sí?... Mmm.
Jooooo! Darte vacaciones y largarte a algún sitio es mejor idea que darte vacaciones de ti mismo, no te vayas, eres constructivo de lo que no hay!
Si te vas unos días de allí por donde vives, intenta que el sitio y sus gentes sean bien diferentes, hablen otra lengua y coman diferente. No es lo mismo que olvidarse de uno mismo, pero da el pego y te lo pasarás mejor. Algun@s lo hemos probado con algún viaje sin rumbo y volvimos renovad@s.
Si te vas nos dará mucha rabia...
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