Me gusta saber leer. Hoy he buscado una sombra en la plaza de San Bruno y he leído un rato hasta que ha salido mi hija del colegio. No logro mantener mi atención mucho rato en el libro, cualquier cosa me distrae. Mientras leía estaba escuchando el sonido de una escoba barriendo la plaza. Un barrendero vestido de naranja barría cerca del carrito donde echa la basura. Dos niños pequeños jugaban con el carro, sacaban cosas de dentro y Luis, el barrendero seguía barriendo. Son sus hijos, estaban pasando la mañana con él. Su mujer, que también le acompañaba, se ha sentado a mi lado. Es mi marido, me ha dicho, ¿no lo despedirán porque lo sigamos verdad? No lo se, le he respondido mientras me encogía de hombros. Un pequeño silencio, una línea leída y otra frase de la mujer, que gusto leer ¿verdad? Un monosílabo, si. La verdad es que no le he dado importancia al comentario. Oye, ¿tu sabes donde me pueden hacer un certificado donde ponga que no se leer?, es que me lo ha pedido el abogado. No esperaba una pregunta así, jamás me lo había planteado. Esa mujer gitana no sabía leer y necesitaba un certificado de que era cierto. Ni idea, ha sido lo único que he podido contestarle. Se ha levantado y se ha ido con sus hijos. De repente me he dado cuenta de la importancia de su frase. Si, es un gusto saber leer.
2 comentarios:
Un gusto saber leer y un placer enorme leerte :)
Besos (al blanco y negro se ha sumado ya el verde de la esperanza, como siempre, espera... blanco, negro y verde... la bandera extremeña... algo se me ha perdido, algo que vino de allí... vale, igual se me empieza a ir la cabeza... voy a mirar los molinos, a ver que veo :D)
ves que bien la va ese verde a tu vida...
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