La chica de la curva se me ha aparecido alguna vez en los últimos años. La chica de la curva me da miedo. Cuando la veo cierro los ojos o miro para otro lado. La chica de la curva representa el miedo a ser capaz de mirarla a los ojos. Hace poco tiempo que se me ha aparecido en la carretera de nuevo. Esta vez la he mirado, con miedo claro, pero la he mirado. Estaba como siempre, con un vestido de gasa blanco. Hermosa y también terrorífica. Se ha subido al coche, y hasta ahora no me ha dicho eso de "cuidado con la curva", ni he visto que ya no estaba al darme la vuelta después de casi matarme en una curva por culpa de la niebla . Todavía está, viaja de copilota y hasta tal vez vayamos a recorrer Nueva Zelanda en autocaravana. Sería la leche. Ahora ya no me da miedo, hasta casi me parece una leyenda urbana. Pero es real, es la chica de la curva. Así que no tengáis miedo si vais en coche durante un tiempo largo, que la chica de la curva va conmigo este verano.
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