lunes, 13 de diciembre de 2010

Cadenetas

Cuando voy por la calle con mi peque o sin ella, inventamos esos pequeños juegos como no pisar las rayas blancas de los pasos de cebra, no respirar hasta ver un coche rojo, sumar los números de las matriculas, coger el dni de la cartera sin sacarla del bolsillo, etc. Pero a veces voy por la calle y encuentro un grupo de señoras, normalmente tres o más, que van agarradas de los brazos con sus bolsos colgando a la misma altura y quieren jugar a la cadeneta conmigo. No es fácil escapar, caminan lentas pero decididas a taponar las calles y atraparme. Una de las características de estos grupos suele ser que gritan al hablar y que se quejan de todo. Si te las encuentras en un semáforo y vienen hacía la acera en la que estás, casi te obligan a meterte entre los coches para no ser detenido en tu trayectoria. Y yo no quiero jugar a la cadeneta, pero me da miedo decirles algo. Si les digo, posiblemente gritarán diciendo que soy un maleducado. Así que las evito, casi casi me dan miedo. La otra noche soñé que iba por una calle estrecha y una cadeneta de cuatro señoras me atrapaban y acababa tomando chocolate con churros en una cafetería llena de otros grupos de cadenetas organizadas que descansaban antes de salir de nuevo a la calle para atrapar a más viandantes. Uffffffffffffffffffffffffffffffffffffffff.

4 comentarios:

tribandrum dijo...

jajajaja, a mi me pasa lo mismo con las señoras que describes, pero yo no juego a la cadeneta, aunque he jugado, me ha hecho gracia, y el julian este muy bien.

Mayte Sánchez Sempere dijo...

Entre esas y las de los paraguas... la calle está llena de peligrosas señoras con planes malvados, je je je.

Besos.

Jose dijo...

... un jugarse la vida cada día

Jose dijo...

... un jugarse la vida cada día